Aquel festival, aquel al que TODO el supuesto mundo fué, eso dependiendo de donde lo mires, puede ser bueno o malo. Bueno, mirándolo desde la visión del dinero que se gana, que cuanta más gente mejor, y que los grupos se sienten mejor cuanta más gente, etc...
Se ha creado mucha polémica, entre la gente que fue por la música, y la gente que fue por la fiesta.
Allí dentro se encontraban personas de todo tipo, desde los más indies (verdaderos), hasta los mayores amantes de la electrónica; pasando por gente normal, pijos modernos, falsos, hippies, fiesteros, borrachos, unos cuantos hipócritas, gente urbana, y personas peculiares y únicas. El SOS, está considerado como un festival indie, para el que no lo sepa, estilo musical que trata música independiente, en esta 4ª versión, el tema en el que se ambientaba eran las discotecas, de ahí la música electrónica, en la antigua edición, que la mayoría de gente no conoce, la única electrónica que había eran dj's de relleno y los de madrugada, lo demás, indie. Este festival, no pierde su tema principal, del cual, como no mucha gente sabe, es la SOStenibilidad, el arte y la reflexión. El SOS ha sido tan popular este año, gracias a las redes sociales, y a considerar que ir al SOS implica ser lo más guay de tu instituto, llevar esa pulsera y fardar de que has estado en un festival de música patrocinado por una cerveza.
Gastarte 60 euros en un festival indie, al cual solo vas por "la fiesta", por beber, no saber donde estás, no saber ni que grupos escuchas, es algo derrochante por su parte, porque para eso, simplemente vete a Atalayas, que haces lo mismo pero por menos dinero. ¿Ir a Atalayas no es ser el más guay de tu clase? Te jodes, ir al SOS por mucho que te creas, no es ser el/la mas guay de tu clase.
La gente que fue por la electrónica, vale, se entiende, el festival estaba ambientado en ello, y a la gente que le gustan los grupos que tocaron y los escuchan se entiende su presencia, pero hay gente, que se compra la entrada de un festival, porque van todos sus amiguitos, pero ni siquiera le a echado un ojo al cartel, gente a la que en su vida le ha gustado esa música, y luego hablan de ella como de toda la vida. Gente que se compra la entrada y se tira la noche entera fuera borracho. Gente que solo va para echarse fotos y decir: "yo estuve allí" (como si fuera el mayor logro de su vida).
Se respeta el gusto musical de cada uno, pero no os negeis a vosotros mismos vuestros gustos, ni os mintáis creyendo que de verdad os gusta, cuando a los dos días después, volveréis a vuestra música de siempre, solo fue un capricho. Gente que se niega a pagar cosas baratas diciendo que es muy caro, y luego comprar la entrada del SOS sin mirar el cartel. Hipocresía, dura y pura.
Cuando un simple fan de un grupo que lleva escuchando desde hace la vida y solo desea una foto, un autógrafo o un simple hola, observa, que gente se hace fotos, sin siquiera saber al lado de quién está...
Esos pijos modernos gafapastas, que piensan que si no estuviste en el SOS no eres nadie, que no estás en la onda, que ellos lo están por intentar vestir o parecer "alterne" (o su versión de alterne), el indie no es moda, la moda destruye lo que toca, acaba con los verdaderos valores de esa cosa, un simple estilo musical, un deporte, el mero hecho de hacer fotos, etc... cuando te sentías especial, o diferente solo por estar fuera de la moda, de lo que todo el mundo lleva, no ser un prototipo como todos los demás, de tener tus ideas y tus gustos, que podías compartir con aquella gente que era igual que tú. La moda lo invade, lo implanta y acaba destruyendolo, entonces, todo el mundo es como tu, dejas de ser independiente a los prototipos, pasas a ser uno de ellos, ya no se valora que tu oigas, hagas o practiques algo, simplemente eres igual que todos los demás.
Verdadera y cruel visión de la realidad.
